Este historiador británico se ha convertido en una de mis más importantes influencias. Lo descubrí hace unos años por casualidad cuando en el cable transmitieron un captítulo de su serie sobre el arte. Lo que me atrajo de inmediato fue su capacidad para desmitificar los temas históricos y hacerlos atractivos con su narrativa, así como tratar de vincularlos con nuestro entender moderno. Luego pude ver por internet su serie sobre la historia de Inglaterra, que es una de mis más grandes directrices para la tesis.
En estos meses encontré algunas obras interesantes de él como los Podcast de A Point of View, los artículos que escribió para el New Yorker sobre la elección británica de este año, o la entrevista que le realizó al Primer Ministro Cameron en estos días. De su estilo, lo que me agrada es la capacidad que tiene para hacer comentarios humorísticos relativos al tema, pero sin hacerle perder su seriedad e importancia.
Algo que también es muy propio de él, pero que también es muy parodiado es el uso de imágenes abstráctas y poéticas para explicar visualmente los elementos históricos. Pero sea en el medio en el que se exprese, o hable de cualquier tema, su estilo para narrar los hechos históricos los hace aún más interesantes para mí y a veces puedo imaginar su voz mientras leo sus textos. Algún día quisiera poder imitar su estilo en mis propios escritos e inspirar a las personas sobre la historia como él lo hace.
No hay comentarios:
Publicar un comentario